Significado y uso del término “Ossu”: la expresión de un coraje

Por José Miguel Domínguez

石の上にも三年
Ishi no ue ni mo san nen.
(“Tres años sobre una piedra.”)
Proverbio japonés

Sobre el final de una tarde calurosa, los practicantes comienzan a llegar al Dojo. Al principio, uno por uno, como las gotas que anuncian tímidamente un aguacero. Luego, conforme se aproxima la hora, lo hacen en grupos. Apenas cruzan saludos o cortesías, más concentrados en reconocerse dentro del tatami que fuera de él. Pese a esto, el primero que ha llegado, el que se ha cambiado antes que nadie y exhibe ya una sonrisa apacible, es el Shihan.

En el primer día del año, cuando Buenos Aires acusa una desolación casi absoluta, alrededor de cien personas se reúnen para el Shinnen Geiko. (1) Sosegarán su inquietud, sus pensamientos, los deseos que el probable festejo de la víspera habrá cimentado. Se alinearán en postura seiza, por varias filas, y ofrendarán su cuerpo y su espíritu al Shomen, en armónica salutación.

Más tarde, cuando la clase esté avanzada, cuando todos hayan transpirado y lo mundano sea menos que un vestigio, se les pedirá mayor intensidad y velocidad. En ese momento, nunca en otro, nunca del mismo modo, se oirá al unísono la voz que es motivo de este artículo: ¡Ossu! Pronunciada desde el bajo abdomen, como un rugido, un grito de guerra que resume convicción y perseverancia. ¡Ossu!

El término es una contracción de dos palabras japonesas: la primera, “oshi”, significa literalmente “empujar”, y simboliza el espíritu de combate, la importancia del esfuerzo para afrontar obstáculos, la acción de empujarlos lejos con una actitud positiva y decidida; la segunda palabra, “shinobu”, significa “soportar, resistir, sufrir”, lo que expresa el espíritu de perseverancia, el coraje para sufrir el dolor y resistir la depresión con paciencia, sin rendirse, siempre con la moral alta.

La palabra resultante de esta asociación es “osu” o también “ossu”, que se pronuncia “oss” y significa literalmente “empujar y resistir” o “empujar la resistencia”, o incluso “empujar el sufrimiento”, lo que deriva en los sentidos de “paciencia, determinación y perseverancia”.

El adiestramiento marcial, el cultivo de cualquier vía del Budo (artes marciales japonesas), supone un esfuerzo y una dedicación muy especiales. Buena parte de ese empeño, de los obstáculos que deben sortearse para llevarlo a cabo, se afronta victoriosamente por medio del Ossu. Los ejercicios, las técnicas, la puesta en práctica de una ética ajustada, requieren constancia y repetición incansables, imponen desalentarse y recobrar esperanzas con mayor ímpetu, para descorazonarse nuevamente (porque los ejercicios no salen fácilmente), en un movimiento que puede durar muchos años hasta la consolidación, la interiorización de la forma y fondo de la disciplina. Ossu implica la fuerza de voluntad necesaria para resistir hasta el límite. Es una llamada al interior de uno mismo para aguantar, luchar y superar las debilidades de la condición humana.

Queda definido el sentido principal de ese clamor que brota en medio de una práctica de Aikido o de Karate, por ejemplo, cuando su Sensei, consciente del pulso de la clase, presiona a los discípulos.

Ahora bien, ¿qué otras significaciones apareja la voz Ossu?

Por un lado, comprobamos que también se utiliza con un sentido más laxo, aunque siempre en el contexto de los usos de etiqueta. Ha llegado a ser una expresión cotidiana, comprendida e intercambiada por numerosos practicantes de diversas nacionalidades, para reemplazar enunciados como “gracias”, “encantado”, “adiós”, “entendido” y “comprendo”.

Ya lejos incluso de estos otros sentidos, hallamos que la misma voz puede ser asociada a cierto uso que se ha hecho de ella en las universidades japonesas dominadas por la ultraderecha. ¿Contenido militarista? ¿Expresión de la que algunos, en el propio Japón, intentan distanciarse por su carácter marcadamente ideológico?

La discusión queda abierta.

No obstante, iniciamos esta nota con el “Ishi no ue ni mo san nen”, proverbio japonés que suele traducirse como “Tres años sobre una piedra”. ¿Cuántas veces hemos escuchado, de boca de nuestros maestros de Aikido, que son necesarios no ya tres años sino diez para alcanzar una mínima comprensión del arte? Diez años sentados sobre una piedra, hasta que ella se convierte en un asiento confortable. Convicción, confianza, perseverancia, resistencia. Estos son los sentidos que atribuimos nosotros al Ossu. Nos servimos de su carácter para no abandonar la práctica, para persistir y empeñarnos en ella, aunque el camino no luzca llano, para resignificar el “día a día” y extraer de nuestro interior lo que ignorábamos estaba allí: una voluntad, una intención que desafía los límites y que acaso no promete otra cosa que la posibilidad de, alguna vez, sonreír afable y pacíficamente a nuestros propios hipotéticos alumnos. ¡Ossu!

(1) Shinnen Geiko es la primer práctica de Aikido del año. En Hombu Dojo, Japón, se realiza a las 00:00 hs. del 1 de enero. En Buenos Aires, el CDA (Centro de Difusión del Aikido) abre sus puertas hacia la tarde del mismo día con el propósito de comenzar el año practicando. La entrada a esta clase suele ser libre y gratuita, y su conducción está a cargo de Sakanashi Masafumi Shihan.

8 comentarios en “Significado y uso del término “Ossu”: la expresión de un coraje

  1. d.

    Qué buena nota!… no soy practicante de Aikido, pero realmente fue insipiradora. Creo percibir la práctica del Aikido en todo su sentido a través de tus palabras como una filosofía de vida, y una filosofía de ideas y valores, cuando menos, inspiradores y emocionantes realmente. Gracias por compartirlo! Saludos!

    1. Muchas gracias a vos, Diana (?), por leer y comentar. Es muy bueno encontrarse con devoluciones de los visitantes. La experiencia de la práctica es más emocionante aún que este compendio de palabras. Cuando desees participar como espectadora o practicante no dudes en comunicarte. Te sugeriremos algún Dojo y maestro que esté a tu alcance. ¡Saludos!

  2. Walter Rejala

    Excelente nota..al igual que Danilo Guida, también lo entendía solo en su contexto de «comprendido», «gracias» o más en mi caso «sí sensei»..Saludos.

  3. Hola amigos me encanto este Articulo soy profesor de Karate Kyokushin y justo estoy preparando un material para esta cuarentena para mis estudiantes mucas gracias
    Ossu!!!

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